EXPERIENCIA CON UN FANTASMA

Ayer me pasó algo bastante inquietante. Una persona con la que he estado trabajado, originó que se acabara todo tipo de relación laboral con ella, por el simple hecho de no pagarme lo que me debía. Tras darme largas durante un mes y medio, para evitar abonarme lo que es mío, me llamó para desvalorar mi trabajo, con la picardía de seguir engañándome con embustes y falacias, tales como: “Ahora te iba a dar más dinero por el trabajo”. Este individuo, desprestigió todas las horas que le había dedicado a trabajar para él y para su negocio. Las formas con las que se dirigió a mí, tampoco fueron las adecuadas, subiendo el tono en repetidas veces y de malas formas. Todo esto puedo certificarlo.

Lo que me debe es de antes de verano, y le empecé a reclamar el dinero, como he dicho anteriormente hace un mes y medio, porque me hacía falta. Al igual cuando le hacía falta mi trabajo, y a las pocas horas lo tenía concluido. Finalmente, no voy a ver ni un duro.

Estoy muy cansada de los caciques, que piensan, que por ser los que te dan ocupación, tienen derecho a decidir cuándo pagarte, o en mi caso ni eso. Mientras que de buena fe, los trabajadores les dedicamos el tiempo que sea menester.

Indignación, humillación, rabia, dolor, pena, impotencia, es todo lo que siento ahora. Es una mezcla de sinsabores que me corroe la mente desde el día de ayer.

“Yo te iba a pagar” Me decía.

Lo que más detesto en este mundo es la mentira, la falsedad y la picaresca. Las “largas” tienen las patas muy cortas – que paradoja - .

“Sí, lo reconozco, te he estado dando largas” Me replicaba descaradamente.

Si desde un principio hubiera sido claro, con la verdad por delante, probablemente no hubiese pasado esto.

Si tú cuentas con mi trabajo, yo cuento con "los dineros" que vale.

“Me importa una mierda” Palabras textuales dichas por este individuo, que desvaloran mi labor y la desmerecen.

Una persona a la que quiero mucho, me decía ayer: “no te puedes fiar de nadie”. Yo le dije “Sí, si te puedes fiar, pero si te la juegan una vez, tienes que ir con cuidado para que no haya una segunda”.

A veces pienso, que le estoy dando mucha importancia a esto, pero me jode que la gente me falle así.

Viendo venir el pampaneo, tomé medidas para que la trápala no fuera tan desfavorable a mi favor, guardándome un As en la manga, que al fin de acabo, no me ha servido de mucho, únicamente para salvaguardar un poquito mi dignidad.

P.D.: Si alguna vez lees esto, ten en cuenta que el tiempo pone a cada persona en su lugar. El ser impresentable no es una virtud, todo lo contrario, es una incapacidad que hará que nunca seas brillante.

Pero que nadie nunca me quite la sonrisa. Ni a mí, ni a nadie.

=D